¡Perfecta!, la depilación queremos que sea perfecta, eliminar todo indicio de vello en nuestro cuerpo. Y más en esta época en la que lucimos más la piel. Pero no es tan fácil como parece, hay lugares a los que llegar se convierte en un verdadero trabajo de contorsionismo, los pelillos más rebeldes se niegan a salir por más que lo intentes, y los más cortos no se ven, pero ahí están y ¡lo sabes!
Lo que yo me pregunto muchas veces es ¿cuanta gente ve lo que a mi me parece muy evidente?. Decirme la verdad, en la piscina o en la playa, ¿cuantas veces miráis el nivel de depilación de las demás? Personalmente ¡nunca! porque realmente ¡no se ve nada!
Creo que a veces se nos va un poco la mano con la perfección, y eso lo sufre la piel. Cuando el vello es muy corto, de verdad que no se ve!!
Es tal la tortura que tenemos con la depilación, que hay cierto movimiento de mujeres que han decidido pasar de la depilación, salir de la tortura que supone, y demostrarle al mundo que no es necesaria. Personalmente no comparto este movimiento pero lo entiendo y envidio su capacidad. yo no la tengo, soy una histérica de la depilación. Pero esto nos demuestra que podemos relajarnos un poquito, que si ha empezado a salir de nuevo el vello, aún podemos esperar un par de días, que nadie lo va a ver.
De todas formas si aun así eres una histérica de la depilación como yo, con la manopla de depilación Silnatur, puedes atacar a esos pequeños malvados que empiezan a salir tan pronto, y sin preocuparte de que tu piel sufra como con las cuchillas o la cera.